En la asignatura Teoría de la Argumentación Jurídica este semestre como parte de la evaluación teníamos que formar equipos de seis personas, tres hablarían a favor de un tema y tres en contra, en mi caso fue la Ley de Laicidad francesa que consiste en no llevar, usar, portar objetos ostensibles de alguna religión a las escuelas públicas.
Al principio me tocaban los argumentos a favor pero los compañeros que les correspondía lo opuesto no estaban dispuestos a hablar bien de algo que consideraban estaba mal, situación que me pareció absurda porque el ejercicio se trataba de argumentar y como abogado en muchas ocasiones no estas de un sólo bando y tienes que esforzarte y abrirte al tema.
Acepté los argumentos en contra porque era como un reto, ya que es muy fácil tener la actitud buena onda, hablando de derechos fundamentales por aquí por allá, y que el mundo siga su curso.Uno de los pilares de la república francesa es la laicidad, el argumento más fuerte era que ya en la práctica de la ley se había encuestado a la población francesa incluyendo musulmanes, cristianos, etc. y la mayoría estaba a favor de ella.
Se habló mucho de la burka ya que evidentemente es muy visible esta ropa tradicional usada por las mujeres que pertenecen a la religión islámica, y de la opresión que puede dar a la mujer esta vestimenta, que incomoda mucho a los franceses que no quieren que se asiente una religión en específico, estableciéndose comunidades religiosas y hacer publicidad si así lo queremos ver de sus creencias.
Hasta que punto los seres humanos somos capaces de limitar nuestra libertad, en este caso lo es la religión para obtener el bien común?
Los creyentes pueden sufrir discriminaciones, negarse a hablar de algún tema en clase, no obedecer algún reglamento por su religión etc. sólo era una prohibición en las escuelas públicas, y a consideración de cada director para mantener un orden.
Hablamos mucho de respeto y opinamos pero quien en un salón de clase ha tenido a una compañerita musulmana con burka? lo pregunto porque la experiencia nos puede ayudar más que un simple comentario, los europeos tienen una visión distinta eso también es importante.
Ahora que curso segundo semestre de maestría he aprendido que las religiones limitan mucho la forma de pensar, razonar y hasta en las decisiones que tomamos todo en ellas son dogmas y los tomamos como tal, y me he vuelto más abierta en ese sentido no quiero decir atea o cualquier otro termino, soy católica y lo seguiré siendo porque me tranquiliza mucho pensar que hay un ser supremo que me cuida y escucha cuando quiero, pero en mis acciones he empezado a responsabilizarme de ellas y de sus consecuencias, no pensar que si salen mal son el resultado de un castigo por mi terrible comportamiento, y a cumplir lo que quiero por que si no lo hago nadie lo hará, voy creando mi realidad, aunque muchas veces no salga como lo deseo. A mi no me gusta hablar de religión con amigos y familiares porque podríamos tener disgustos innecesarios, por ello tampoco en la escuela me gusta que se toque el tema.
Es claro que en México no estamos preparados para hablar de una laicidad, el resultado de la votación de la ley en el salón de clase fue unánime por los que estaban en contra, ganaron incluyendo el voto de la maestra.
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